Francisco Díaz del Taño, fue un sacerdote jesuita que tuvo una importante experiencia misionera entre los Guaraníes del Tape. Nasce en La Palma, Canarias. Estudia en Sevilla. En 1616 ingresa en la Compañía de Jesús y en 1622 viaja a América. Fue Superior de las Misiones del Uruguay y nombrado Procurador de las Misiones, junto con Antonio Ruiz de Montoya, para viajar a Europa y gestionar la autorización de autodefensa armada de los Guaraníes. Su gestión permitió obtener del Papa Urbano VIII la Bula Commisun Nobis del 22-IV-1639, que corona el objetivo de su viaje. Después es nombrado rector en 1665 del Colegio de los Jesuitas en Córdoba, sede del Obispado de Tucumán, donde fallece en 1677.